La poda
Es imprescindible para nuestras plantas, árboles, arbustos… una poda bien hecha. Es fundamental hacerla con una buena herramienta limpia y afilada, ya que un mal corte puede dar lugar a pudrición completa o parcial.
Empiece quitando las ramas muertas, después quite las ramas en doble (las que se cruzan y que están en competencia con otras ramas que tienen la misma dirección).
El corte se hace a unos 5 a 6 mm por encima de un brote. Intenta respetar en la medida de lo posible la forma natural del árbol o arbusto.
Realizaremos un corte diagonal y lo más corto posible, la parte baja del corte debe encontrarse en el lado opuesto del brote.
En plantas aromáticas, como el orégano, la menta, el tomillo… poda tras la floración para provocar un nuevo desarollo sano si no,
se harán leñosas.
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